Estrella de la F1 enfrenta sanciones de la FIA tras su explosivo rant "oh Dios mío"
Controversia por el lenguaje en la Fórmula 1
Un destacado piloto de Fórmula 1 ha arriesgado una mayor sanción por parte de la FIA tras un arrebato lleno de groserías después del Gran Premio de Las Vegas. El uso de lenguaje inapropiado en el deporte ha sido un tema candente desde septiembre, cuando el presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, instó a los pilotos a ser más cuidadosos con su conducta, afirmando que quienes están en el automovilismo no son raperos.
Reacciones a las sanciones por lenguaje inapropiado
La controversia se intensificó cuando Max Verstappen fue sancionado por la FIA por usar lenguaje ofensivo en una conferencia de prensa durante el Gran Premio de Singapur. Tras describir su auto como f****d, el piloto neerlandés recibió una sanción equivalente a servicio comunitario, lo que generó críticas, incluso de su rival Lewis Hamilton, quien calificó la sanción como una broma.
El caso de Charles Leclerc
Otro piloto que ha enfrentado sanciones por el uso de lenguaje inapropiado es Charles Leclerc, de Ferrari. Durante el Gran Premio de México, Leclerc se quejó de haber perdido el segundo lugar ante Lando Norris, expresando su frustración con un F**k. Aunque no recibió el mismo tipo de sanción que Verstappen, fue multado con €10,000, de los cuales la mitad fue suspendida bajo la condición de que no hubiera más infracciones similares en el próximo año.
El arrebato de Leclerc en Las Vegas
Después de finalizar en cuarto lugar en el Gran Premio de Las Vegas, Leclerc no ocultó su descontento. En la radio del equipo, expresó: “Sí, hice mi trabajo, pero ser amable me perjudica todo el f***ing tiempo”. Además, tras perder la pole position en la clasificación, se dejó llevar nuevamente, diciendo: “S***, s***, s***.
Por f***'s sake. Los neumáticos se sentían completamente diferentes”.
¿Qué pasará con las sanciones por lenguaje inapropiado?
Con las recientes sanciones impuestas a Leclerc y Verstappen, la situación se vuelve cada vez más delicada. La FIA ha comenzado a tomar medidas enérgicas contra el lenguaje inapropiado, pero aún no está claro si estas sanciones se aplicarán también a los comentarios realizados dentro del auto.
Será interesante observar la respuesta de la FIA y si su reciente enfoque en la limpieza del lenguaje se extenderá a la comunicación en la cabina.
En resumen, la Fórmula 1 se enfrenta a un dilema sobre cómo manejar el comportamiento de los pilotos y el uso de lenguaje inapropiado, lo que podría tener repercusiones significativas en el futuro del deporte.